martes, 11 de enero de 2011

Yo tengo un sueño


"Yo tengo un sueño que un día cada valle será exaltado, cada colina y montaña será bajada, los sitios escarpados serán aplanados y los sitios sinuosos serán enderezados, y que la gloria del Señor será revelada, y toda la carne la verá al unísono."

No hace falta aclarar quien dijo estas palabras. Siendo uno de los discursos mas emocionantes que se hayan dado en la historia de la Humanidad. Pareciera que en el año 68 se intentó matar, vaya a saber por intención de que mano vil, a todo el pensamiento de los jóvenes del mundo.

Claro que es bueno reconocer que bastante bien lo han hecho. Volcando a las mentes de los niños y jóvenes a un mundo que entra por los ojos, que se hace desear sin tener posibilidades de acceso a ese estilo de vida. Es lamentable ver como los niños y jóvenes hoy día, desgarrados por un vacío interior insondable, son tomados con la guardia baja por las drogas, el alcohol, el consumismo masivo de artículos y programas, juegos de internet y redes sociales y una vida de promiscuidad sexual.

Todos somos culpables de eso, tanto por acción, como por omisión. Tal vez nunca en la historia de la humanidad se tuvo tantas herramientas para hacer frente a las vicisitudes de la vida y de la naturaleza, pero la realidad indica que nunca en la historia de la humanidad las masas estuvieron tan hipnotizadas como lo están en este momento. Existe un descreimiento total en los valores humanos, la Etica y la Moral ya son dos desconocidas en los círculos estudiantiles, las Religiones ya no son el camino para reforzar la fe y la roca donde han de crecer los valores, sino que se han convertido en sectas donde acuden los incautos y pobres faltos de guía, y son tomados y atrapados por lobos vestidos de corderos, que luego de realizar algunos actos típicos de un mago con un entorno hipnótico, luces y demás, convencen de que esa es la casa de Dios. Pocos son ya los lugares donde se predica la verdadera palabra de Dios y las enseñanzas del gran Cristo, como de cualquier otra religión. Así como el Islam ha sido vejado en la opinión pública de Occidente el Cristianismo ha degenerado en grupos de personas con tal anemia de sentimientos y de verdadero poder, se juntan para alimentarse los unos a los otros de sus propias falencias, es decir, de su propia carne.

Sin embargo recuerdo las palabras de Martin Luther King. Varias veces he visto el video y he escuchado la fuerza de su voz. Y sé que no ha muerto. Será que la Vida sigue luchando contra el cáncer que es cierta porción de la Humanidad que pretende seguir destruyendo todo a su paso. Será que la vida ha comenzado a despertar a jóvenes en todo el mundo que han de preparar la gran revolución mundial y la llegada de un nuevo orden mundial. Por favor, no se confunda con el Novo Ordo Seclorum de los Illuminatti, Bilderberg y otros grupos. Hablo aquí de un Nuevo Orden Humano, donde definitivamente sea separado el trigo de la cizaña, un mundo donde prime la razón, los buenos sentimientos, la cooperación. Claro que lo que se plantea es utópico y costaría. Si embargo, si puede pensarse, si puede ser imaginado, todo es posible. No lo dice un soñador, porque aquí he parafraseado en parte a Ludwig Wittgenstein.

Claro que para eso hay que estar dispuesto a entregar la vida, a morir por amor, tanto metafóricamente como en la práctica, hay que estar dispuestos a dar la vida. Como se decía en los tiempos de la Revolución Francesa, "Las Revoluciones se comen a sus propios hijos", algo así como Saturno comiéndose a su hijo de Goya. Pero es bueno recordar las palabras de M. L. King "si uno no sabe porque vale la pena morir, no es digno de vivir".

He dejado siempre el corazón en cada esquina, en cada amistad, y en cada mujer que amé. Y hoy en día amo mas nunca a una mujer que llena mi alma con la luz de sus ojos negros y a un hijo hermoso, y es por ella y por él que no puedo dejar de decir lo que pienso, de escribir lo que pienso, porque de lo contrario sería traicionarme a mi mismo, y dejar de ser quien soy, y estaría caminando con la turba hipnotizada.

Jóvenes del Mundo, es hora de despertar de nuestro letargo, es hora de mover montañas. Estoy convencido que hay algo preparado, una sorpresa, para cuando las fuerzas intelectuales de aquellos jóvenes que lucharán por la sobrevivencia humana y de los valores humanos se tomen de la mano.

Y si la vida, el Destino, o nuestra propia elección nos han llevado a la derrota, quedará en los registros de la Historia del Universo, en la memoria del Universo, que los Jóvenes del Mundo de todas las edades y de todos los géneros lucharon hasta la muerte por salvaguardar su mismísima condición humana, la de los ideales y la de los principios, siendo uno de ellos: Morir por Amor.

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